04-11-2012 | J.A. "Txitxo" Díaz |
Es evidente que la Real Sociedad no ha dado el salto de calidad pretentido cuando se cesó a Martín Lasarte y se trajo al "Guardiola francés", tal y como se nos vendió en su momento. El consejo de administración realista, que se ha mostrado muy ambicioso con la confección de la plantilla y la política de renovaciones, debe ser valiente y tomar el toro por los cuernos. No podemos perder más tiempo.
Los números de Montanier, indefendibles
Para criticar algo hay que ser objetivo, tener datos, y los números de Phlippe Montanier hablan por sí solos. Desde la llegada del normando, la Real no ha mejorado el rendimiento del equipo a domicilio. Es más, con el de Vernon en el banquillo, los txuriurdines sólo han conseguido 3 victorias en 24 partidos de Liga. 6 empates y 18 derrotas completan la estadística con el normando a domicilio. La última victoria realista como visitante tuvo lugar el pasado mes de Enero.
Donde sí se ha mostrado más o menos fuerte la Real de Montanier es en su feudo. En Anoeta, el normando ha cosechado 12 victorias en 24 partidos, además de 6 empates y 6 derrotas.
Si traducimos estos números en puntos, podemos decir que con Montanier la Real ha cosechado, a domicilio, 15 puntos de 72 posibles. En Anoeta, con el normando en el banquillo, la Real ha cosechado 42 puntos de 72 posibles. Sumando los partidos a domicilio y los de casa, podemos afirmar que Montanier ha conseguido sumar el 39,58 % de los puntos disputados (57 de 144 posibles)
El consejo debe actuar con valentía
Philippe Montanier dispone de una plantilla que muchos equipos querrían tener. Es obvio que la Real tiene equipo para luchar por entrar en competición europea, pero para eso hay que tener un entrenador que sepa sacar todo su potencial. Y el normando lleva casi año y medio demostrando que él no es capaz, que no es el "Guardiola francés" que nos vendieron desde algún medio de comunicación, ni mucho menos.
Cuando se fichó a Montanier, que era la segunda opción del consejo tras Marcelo Bielsa, se nos dijo que las jornadas de entrenamiento serían en muchas ocasiones de hasta 8 o 9 horas diarias. Se acometieron para ello obras en Zubieta, pero nada. Los entrenamientos en Zubieta son de risa, muy flojos, y apenas se trabaja el aspecto táctico y las jugadas de estrategia. Es más, los entrenamientos no duran más de una hora la mayoría de las veces.
Por todo esto, y viendo la ineptitud mostrada hasta ahora por Philippe Montanier a la hora de gestionar los partidos y la total ausencia de capacidad de reacción que demuestra el normando jornada tras jornada, el consejo de administración debe cortar por lo sano y actuar con valentía, todo lo demás será perder un tiempo precioso. La afición ya ha mostrado de forma mayoritaria su desencanto con el de Vernon, veremos si se le escucha. Estamos a tiempo.
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